How to Rebuild the Canadian Dream: Homes, Competition, Growth
**Título: La Emergencia Habitacional en Canadá: Un Llamado Urgente a la Acción**
Canadá enfrenta una crisis habitacional sin precedentes, y el momento de actuar es ahora. Más del 85% del comercio entre Canadá y EE. UU. es ahora libre de aranceles, pero eso no ha evitado que el país se deslice hacia una espiral descendente. Más de la mitad de los canadienses se sienten impotentes ante una situación que se vuelve cada vez más crítica: el mercado de la vivienda es una bomba de tiempo.
Los precios de las viviendas han alcanzado niveles astronómicos, mientras que los salarios se estancan. En Toronto y Vancouver, el alquiler de un apartamento de una habitación supera los $3,000 mensuales, y la tasa de vacantes se sitúa en un histórico 1.5%. Miles de canadienses se ven obligados a vivir en sus automóviles o a compartir espacios, mientras que el 66% de la población siente la presión financiera de manera aguda.
La situación se agrava con un crecimiento poblacional sin precedentes, donde 1.2 millones de personas se han sumado en un solo año. Sin embargo, la capacidad de la vivienda no ha podido seguir el ritmo, lo que genera una presión insostenible sobre los precios y los alquileres. La falta de oferta ha llevado a que las familias asuman deudas que superan el 184% de sus ingresos disponibles, convirtiendo la deuda en una necesidad.
El gobierno debe actuar rápidamente. Aumentar la oferta de vivienda es crucial, pero no será suficiente sin reformas en las regulaciones, inversiones en infraestructura y una respuesta coordinada entre los diferentes niveles de gobierno. Ejemplos internacionales demuestran que es posible, pero se necesita voluntad política y acción inmediata.
La crisis no es solo un problema económico; es un desafío social que amenaza el futuro de millones de canadienses. Si no se toman medidas decisivas ahora, la propiedad de vivienda se convertirá en un sueño inalcanzable para las nuevas generaciones. Canadá debe romper el cristal de la inacción y activar el extintor de la solución antes de que sea demasiado tarde.