HACE 1 MINUTO: Mel Gibson habla por primera vez “Hasta el día de hoy, nadie puede explicarlo”

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**1 MINUTO ATRÁS: Mel Gibson habla por primera vez “Hasta el día de hoy, nadie puede explicarlo”**

En una revelación impactante, Mel Gibson ha roto su silencio sobre los inquietantes sucesos que rodearon el rodaje de “La pasión de Cristo”. En un video reciente, el director y actor compartió que, a pesar de haber pasado casi dos décadas, los misterios y las experiencias sobrenaturales vividas en el set aún persiguen a quienes trabajaron en la película. “Nadie puede explicarlo”, afirmó Gibson, dejando a la audiencia atónita.

La aclamada película, que rompió barreras en Hollywood, no solo fue un hito cinematográfico, sino también un terreno fértil para lo inexplicable. Durante la filmación, el actor Jim Caviezel, quien interpretó a Cristo, fue golpeado por un rayo en dos ocasiones, un fenómeno que dejó a todos los presentes en estado de shock. “Algunos lo vieron como una señal, otros como una advertencia”, reveló Gibson, intensificando la atmósfera de misterio que rodeó la producción.

Los relatos de experiencias extrañas no se limitaron a Caviezel. Miembros del equipo reportaron sensaciones de mareo y emociones intensas durante escenas clave, como la flagelación y la crucifixión. Mel Gibson, conocido por su enfoque metódico, también fue visto en momentos de profunda oración y reflexión, sugiriendo que la película había trascendido su propósito original.

La filmación, realizada en las duras condiciones de Matera, Italia, se convirtió en un viaje espiritual para muchos. “Era como si algo más estuviera en juego”, comentó un miembro del equipo. A medida que la película se estrenaba, el impacto cultural fue inmediato, desatando tanto fervor religioso como controversia.

Hoy, Gibson invita a la audiencia a reflexionar sobre lo que realmente ocurrió en aquel set. “No fue solo una película. Fue un llamado”, concluyó, dejando en el aire la pregunta: ¿qué otros secretos guarda “La pasión de Cristo”? La historia continúa, y el eco de esos días aún resuena en el corazón de quienes estuvieron allí.

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