Familia, amigos y figuras del fútbol se unieron en un emotivo homenaje el sábado en Gondomar, España, para despedir a los jóvenes futbolistas portugueses Diogo Jota y su hermano André, quienes perdieron la vida en un trágico accidente de tráfico el jueves. La conmoción ha sacudido al mundo del deporte, dejando un vacío irreparable en la comunidad futbolística.

El funeral, oficiado por el obispo de Oporto, se convirtió en un emotivo tributo donde se hicieron presentes varios jugadores de la selección nacional y del Liverpool FC. Entre ellos, el capitán Virgil Van Dijk y el escocés Andrew Robertson, quienes portaron coronas de flores en forma de camiseta con el número 20, el dorsal de Jota. “Es una tragedia. Eran jóvenes geniales, símbolos de esta ciudad”, expresó un asistente, reflejando el profundo dolor que embarga a todos.

Diogo Jota, de 28 años, y su hermano André, de 25, viajaban en un Lamborghini Huracán de alquiler cuando el vehículo se salió de la carretera, aparentemente por el reventón de un neumático, antes de incendiarse. Este devastador accidente ha dejado a los aficionados y colegas devastados, con un libro de condolencias abierto en Anfield, donde decenas de seguidores del Liverpool han dejado ramos de flores y mensajes en memoria del delantero, que marcó 65 goles desde su llegada al club en 2020.

La tragedia ha resonado no solo en Portugal, sino en todo el mundo del fútbol, donde la pérdida de estos dos talentos ha sido sentida profundamente. “Son dos grandes seres humanos que nos han dejado”, concluyó un amigo, encapsulando la tristeza que envuelve a este evento. La comunidad futbolística se une en duelo, recordando a Diogo y André como un legado de pasión y dedicación al deporte.