**TARIFAS FALLIDAS: ¡Toyota DOMINA el Mercado Automotriz de EE. UU. mientras las Tarifas de Trump APLASTAN a Ford y GM!**
En un giro sorprendente, las tarifas del 10% impuestas por el presidente Donald Trump han desatado una crisis en Detroit, catapultando a Toyota al liderazgo del mercado automotriz estadounidense. Lo que se pensó que sería una barrera protectora para las marcas locales ha resultado ser un arma de doble filo, devastando a Ford y General Motors mientras el gigante japonés se adapta y prospera.
Los datos de ventas de los primeros cinco meses de 2025 son contundentes: Toyota ha visto un aumento del 13% en sus ventas, mientras que Ford y GM enfrentan caídas del 4% y 3%, respectivamente. La clave de este éxito radica en la compleja red de suministro de Toyota, que le permite mitigar el impacto de las tarifas, mientras que los fabricantes estadounidenses se ven obligados a aumentar sus precios en hasta un 12% para compensar los costos adicionales.
La crisis de suministro de baterías en Asia ha beneficiado a Toyota, que ha logrado mantener sus márgenes gracias a su estrategia de localización. En contraste, Ford y GM luchan con un aumento de precios que aleja a los consumidores, quienes, en un mercado de crédito donde las tasas de interés superan el 8%, están optando por Toyota en busca de pagos mensuales más bajos.
Los efectos de estas tarifas no solo se sienten en las ventas, sino que también han provocado un colapso en la cadena de suministro de Detroit. Las fábricas de Michigan y Ohio están sufriendo recortes de pedidos, mientras que Toyota sigue creciendo gracias a su capacidad de producción en EE. UU. y su innovadora planta de baterías en Kansas.
La situación se agrava con la depreciación del yen frente al dólar, lo que permite a Toyota repatriar ganancias de manera más eficiente. Mientras tanto, las acciones de Toyota alcanzan máximos históricos, mientras que las de Ford y GM se desploman.
La narrativa de “proteger la industria estadounidense” se desvanece a medida que Toyota se establece como el verdadero ganador en esta batalla comercial. Si la administración Trump no reconsidera su enfoque, el dominio de Toyota en el mercado automotriz estadounidense podría ser irreversible. La pregunta ahora es: ¿podrán Ford y GM adaptarse lo suficientemente rápido para sobrevivir en esta nueva era?