**¡Escándalo en el Castillo de Windsor! Camila humilla a la princesa Carlota y la abuela Kerel Middleton estalla de furia.**
En un giro inesperado y explosivo, la reina consorte Camila ha sido acusada de humillar a la joven princesa Carlota durante un encuentro familiar en el castillo de Windsor. La abuela de la princesa, Kerel Middleton, no pudo contener su indignación y se enfrentó a Camila en una confrontación que dejó a todos los presentes atónitos.
El evento, que se suponía sería una celebración íntima de los logros académicos de Carlota, se tornó tenso cuando Camila, en un tono aparentemente inocente, reprendió a la niña por su comportamiento. “No querríamos que te cansaras antes del almuerzo”, dijo Camila, provocando un cambio inmediato en la expresión de Carlota, quien pasó de la alegría a la confusión. La situación escaló durante el almuerzo, cuando la reina consorte interrumpió a la pequeña mientras compartía sus emocionantes descubrimientos sobre su proyecto escolar.
El ambiente se volvió aún más cargado cuando, durante una conversación en la terraza, Camila reprendió a Carlota por estar “sucia” y “romper su vestido”, lo que llevó a la niña a soltar las flores que había recogido, simbolizando su desánimo. Fue entonces cuando Kerel, visiblemente afectada, decidió actuar. Con una firmeza que sorprendió a todos, se levantó y defendió a su nieta, denunciando la manipulación emocional que estaba sufriendo.
“Esto es sistemático, deliberado e inaceptable”, exclamó Kerel, desafiando a Camila de una manera que nunca antes se había visto en la familia real. La tensión palpable dejó a los presentes sin aliento, y la abuela se convirtió en la heroína del momento, protegiendo a Carlota de la crueldad que había presenciado.
El eco de esta confrontación resonará más allá de las paredes del castillo. La familia Middleton ha decidido que Carlota no asistirá a reuniones privadas con Camila sin la presencia de uno de sus padres, marcando un cambio significativo en la dinámica familiar. Este incidente pone de relieve la necesidad urgente de proteger a los niños de las críticas destructivas, incluso en los entornos más privilegiados. La comunidad está atenta; el futuro de la princesa Carlota podría depender de esta valiente defensa de su abuela.